Una conversación con Gaspar Oliver
— Por menos de tres euros encontré el otro día en una librería de lance la novela “El cazador sordo”.
— ¿Cómo? ¿»El calzador gordo»? Qué título tan bonito.
— “El cazador sordo”, de James McClure. En inglés The Goosberry Fool, un preparado de grosella silvestre, pero también una persona inoportuna que se pega a alguien. O sea, «el idiota pelmazo».